Quién diría que una pandemia podría unir, sin embargo, algunos pudimos aprenderlo durante el Covid encerrados en casa con nuestras parejas, compañeros de piso, o incluso, en nuestros trabajos. Tamara y Eduardo son enfermeros y se conocieron en uno de los momentos más difíciles, ajetreados y preocupantes de su carrera. Entre aquel caos surgió la chispa que tiempo después les llevaría a un merecido viaje a Cuba con un Eduardo nervioso por encontrar el momento ideal para sacar el anillo de pedida que llevaba escondido consigo. 
El "sí quiero" de Tamara nos trajo un 17 de Agosto hasta el Hotel Môderne de Gijón. El ramo de Doña Cúrcuma nos esperaba junto a los zapatos en el alfeizar de la ventana. Yolanda Abarrio se ocupaba de los últimos retoques de maquillaje tras la peluquería de Mirian Martínez. A unos kilómetros de distancia, en la Playa de San Lorenzo, Eduardo se vestía en su traje de Charme Novios con la ayuda de sus padres y el apuro de los nervios. Tamara por su parte había elegido sorprender con un vestido de novia confeccionado por Lucía Incera. Ya en la Iglesia de San Julián de Somió el ambiente era festivo con la familia y los amigos saludando al novio instantes antes de su entrada. Tamara llegaría en el coche clásico de Clásico para bodas acompañada de su papá. Pétalos y arroz a la salida comenzó la sesión de pareja aprovechando los jardines de la iglesia.
Ganas de cóctel, cóctel por todo lo alto con Fran Juesas en la Finca Villa María entonando a voz y guitarra las canciones de toda una vida entre tapa y tapa de Casa Gerardo, abriendo apetito para el banquete de poco después. En la fiesta GRG Eventos nos podría a mover la cadera, sin embargo, Chusma Covers robaría el protagonismo al inicio de la noche con sus versiones de rock. 
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